Para evitar esto, debes conocer a tus clientes, cómo ven tu trabajo y ser ordenado en cada uno de los procesos. La libertad que conlleva ser su propio jefe es fantástica, sin mencionar que el potencial de ingresos también es bastante atractivo. Estos son solo algunos de los beneficios que harían que cualquier persona reconsidere los tradicionales de nueve a cinco.