El vicepresidente económico Eduard Romeu aseguró también, días después, que el objetivo de la entidad es duplicar los ingresos actuales y llegar a los 1.500 millones de facturación en los próximos cinco años. Para ello, la camiseta adquiere una gran relevancia y le puso precio, que debe superar los 55 millones de euros del acuerdo inicial con la anterior marca.